Good Omens (Buenos Presagios). Temporada 1 (miniserie)

(Amazon. 6 episodios: 31/05/2019)
Contiene spoilers

Por suerte, a esta adaptación de la novela de Neil Gaiman (y Terry Pratchet) no le ocurre como a American Gods y no desmerece en absoluto al entretenimiento que te aporta el libro, que es algo, visto lo visto, que resulta más que meritorio. Se trata simplemente de no salirte del texto para explorar las posibilidades visuales o para darle más importancia a la actriz que te gusta. Material hay, y de sobra, como para sacarle partido a lo bueno del texto.

No hay que esperar trascendentalismos, sino que hay que tomárselo como lo que es: una gamberrada cuya premisa prioritaria es entretener (y entretenerse), además de tergiversar los conceptos universales del bien y del mal, cada uno representados por los ángeles y los demonios. Al menos eso no pasa con nuestra pareja protagonista: Crowley y Aziraphale, geniales (como no podía ser de otra forma) David Tennant y Michael Seen, respectivamente.

A un acertadísimo reparto, al que hay que añadir ni más ni menos que a Frances McDormand como Narradora y Dios, a John Hamm como Gabriel o al descubrimiento de Adria Arjona como Anathema, hay que unirle el tono justo entre humor inglés y ese toque gaimaniano de reflexión filosófica, una banda sonora sustentada en Queen (omnipresentes últimamente), los justos y adecuados efectos especiales y un acertado homenaje a la obra en que se basa (homenaje merecido por otra parte).

Las escenas de Crowley y Aziraphale a lo largo de la historia son geniales, desde la expulsión de Adán y Eva hasta el siglo XX, pasando por los ensayos de Hamlet o la Revolución francesa, entre otros. No tan genial como esa amistad forjada siglo a siglo, anteponiéndose a su condición extraterrenal de ángel y demonio, a los que se presume bondad y maldad por encima de cualquier otra consideración, sin esos matices que caracterizan a los seres humanos (a algunos al menos). La reflexión subyacente a esas categorías marcadas son marca de la casa de Gaiman, pero las actuaciones de Tennant (geniales sus cambios de look, su manera de andar y sus gafas de sol, así como su Bentley, sobre todo en llamas) y de Seen (sus dudas, sus reparos, ese dejarse tentar por su amigo demonio, por no hablar de cuando se cambian los cuerpos) le dan un toque extra.

Los carteles a lo cómic indicando el paso del tiempo (la humanidad reducida a los últimos once años, que se corresponden con la edad de Adam Young, el AntiCristo, estupendo también Sam Taylor Buck) van en consonancia con todo lo anterior. En la serie me he enterado mejor del cambiazo del bebé (en el libro me había liado bastante) y se ha mantenido la mejor obra de Crowley, la creación de la diabólica M-25 londinense. Detalles menores como que no aparezca la conversación entre los Jinetes del Apocalipsis sobre nombrar a su séquito no rebajan la nota alta de este producto perfecto para el entretenimiento más gamberro.

Por poner un pero, quizá tanto nombre y tanto actor queda un poco deslucido porque a la postre la participación es un poco menor o residual: desde el propio Hamm, a quien le faltan minutos y le sobran esas extrañas lentillas, pasando por Mireille Enos como una Guerra fatídica y sexy en su primera aparición, pero luego diluida en exceso, y acabando en Benedict Cumberbatch como Satán en una única frase.

Habría que referirse también la fantástica escena de la tan importante Agnes la Chalada que va a la pira por bruja cargada de dinamita y llevándose por delante, entre otros, a No Cometerás Adulterio Pulsifer (que también interpreta al "hacker" Newton, Jack Whitehall), al jeta representante cazabrujas Shadwell (Michael McKean, el detestable Chuck de Better Call Saul), vecino de la pitonisa y exprostituta madame Tracy (Miranda Richardson), además de varios momentos hilarantes, como cuando aparece el Perro del Averno y queda reducido por la pandilla de Adán a un simpático perrín.

Junto con la Maravillosa Miss Maisel, de lo mejor que de momento ha ofrecido Amazon, una recomendación idónea para el verano, momento en que la oferta televisiva suele adelgazar.

Comentarios

Marian ha dicho que…
¡Hola! Solo me queda la mitad de un capítulo para terminarla. Me está encantando y estoy de acuerdo contigo en todo lo que dices sobre esta maravillosa serie. David Tennant y Michael Seen están fantásticos, no sabría con cual de ellos quedarme porque ambos son geniales y me gusta mucho la amistad entre ellos, dos personajes tan distintos
Cuando la acabe, creo que voy a empezar Chernobyl que vi que también te gustó mucho
Besos
Juliiiii ha dicho que…
¿Verdad que para estas fechas es la serie perfecta? Ahora voy a leer tu comentario sobre Chernobyl.
¡Besos!
Miss Bennet ha dicho que…
¿Y de la intro no hablamos? ¡Es la mejor melodía e intro desde GoT! Normalmente paso las intros (Netflix y Amazon Prime) porque me cansan, sobre todo cuando veo varios episodios seguidos, pero esta es TAN genial... <3 Crowly es sencillamente perfecto: esa manera de andar, las gafas de sol y la voz (y la indumentaria) le dan un aspecto chulesco como buen demonio que es, y sin embargo, es enternecedor su afán por cuidar y salvar a Aziraphale al que es imposible decirle que no cuando pone ojitos. Me ha parecido una serie redonda y estoy de acuerdo contigo cuando dices que el cambio de los bebés en el libro no queda muy claro, a mí también me pareció un tanto enrevesado. Lo volveré (y terminaré) a leer a ver qué tal.
Juliiiii ha dicho que…
Sí, la intro es muy divertida, en consonancia con el resto, y un claro homenaje a Monty Pyton ;)

Los dos son geniales. ¡Por fin una buena adaptación! (Y esperanza para Sandman, crucemos dedos).