Girls. Temporada 3

(HBO. 12 capítulos: 12/01/14 - 23/03/14)
Tres temporadas con más de 30 capítulos después, sigo sin saber por qué veo esta serie más allá de que la duración de media hora me viene bien cuando no tengo tiempo para ver una de 45/50 minutos. Un bagaje muy pobre para Lena Dunham, quien por lo visto va presumiendo por ahí de que esta serie refleja a la perfección los problemas de la mujer joven actual. Y por ahí no paso. Todavía si me dices que es una parodia de la juventud moderna fashion, cool, una ácida revisión del postadolescente neoyorquino de pro actual, vale, aunque siempre desde ese punto de vista extraño de quedarse a medio camino entre la comedia, el  costumbrismo y la nadería.

No. Hannah Horvath no puede ser representativa de nadie más allá de sí misma. Sus hórridos vestiditos, su apología de la lorza no disimulada, sus tatuajes indiscriminados, su egoísmo recalcitrante, su falta de empatía casi psicótica y sus vaivenes sentimentales cuasi adolescentes sólo pueden representar una figura aproximada de la petarda insoportable que debe de ser la propia Lena Dunham, cuyo ombligo puede ser el punto geométrico más visto, revisto y admirado en todo el planeta.

Por culpa de este excesivo protagonismo, se echa a perder el resto de personajes que vale, no serán tampoco muy queribles o ni siquiera defendibles, pero no provocan el rechazo que me provoca Hannah:

Marnie a ratos da vergüenza ajena, a ratos se merece un electroshock, pero es reconocible  como personaje en su inseguridad (y además Allison Williams es guapísima); otra que tiene mucho predicamento es Jessa, pero va tan a su bola y es tan errática que para mi gusto queda como una anécdota que en ocasiones hace gracia porque no le importa nada de lo que le rodea (y si profundizan en su drogadicción, encima parece algo llevadero o liviano); Shoshanna es más divertida, con esa mezcla de ingenuidad y un ávido afán por experimentar, y le basta una escena para oscurecer a las otras chicas.

En cuanto a los otros personajes que no son "girls", Adam ha perdido  bastante al mostrarse más centrado (aunque ni lunático me acababa de caer bien, quizás por estar con Hannah, algo indefendible). Su hermana Caroline (Gaby Hoffmann, Ali en Transparent) aparece esta temporada, y es una loca de la vida detestable porque es el típico personaje parásito que me pone de los nervios. Ray quizás es el único de todos al que salvaría de la hoguera en un figurado escrutinio quijotesco, el único que propone una medida cercana a la normalidad en sus actos y decisiones (por más que a veces tampoco sean ideales). Tampoco salvo a Elijah porque es sin más un arquetipo de locaza gay con respuestas imaginativas.

De la trama no voy a comentar nada porque ni los amoríos ni las historias suponen una evolución de ningún tipo para ningún personaje, salvo quizá Shoshanna. Coges la 1ª temporada y estos estúpidos ahora son casi exactamente los mismos estúpidos al principio. Apenas salvaría de la tercera temporada el capítulo 9, Flo (el de la muerte de la abuela de Hannah), así como sus dos canciones, Don't say, de Hannah Cohen, y Don't let us get sick, de Jill Sobule (viva Shazam).

Comentarios